El 7 de enero de 1919, los 800 obreros de los Talleres Vasena, en Buenos Aires, se encuentran en huelga. Reclaman la jornada de 8 horas, aumento de salarios, pago de horas extras, supresión del trabajo a destajo y reincorporación de los despedidos por actividad gremial. Piquetes de trabajadores esperan a las chatas de la empresa para impedir que los "carneros" ingresen a los depósitos. Sobreviene la emboscada. Los vehículos, conducidos por rompehuelgas armados, abren fuego contra los manifestantes. El tiroteo es secundado por la policía. El saldo: 4 muertos y 40 heridos. En repudio todas las asociaciones obreras del momento, anarquistas, socialistas, comunistas y sindicalistas revolucionarias convocan a una huelga general. Los funerales de los asesinados reunen a numerosos obreros. Allí, mientras uno de los delegados da el discurso, un grupo de policías y bomberos armados abre fuego sobre la multitud resultando asesinados más de 50 obreros. Comenzó entonces la resistencia co